Dicen que la fe mueve montañas. Yo digo que, si crees en Dios sea cual sea tu religión, la fe no ocupa lugar y te consuela en los momentos difíciles de tu vida.
Este es mi regreso, el que he demorado por razones personales y familiares. Pero no quiero hacer las cosas de la misma forma. Deseo un inicio diferente, como diferente es mi vida hoy en día.
La primavera ya está aquí. Las estaciones no entienden de virus y siguen su apacible curso. Disfrutemos de este inicio de la mejor manera: soñando con un futuro cercano libre de pandemias. ¡Feliz inicio de primavera!